Esta acción
es tanto por el efecto reflejo como mecánico. Cuando se realiza un contacto
suave con la piel se produce dilatación de los capilares sanguinos y de los
vasos linfáticos en forma transitoria, esto provocará un enrojecimiento de la
zona con aumento de la temperatura, pero si el masaje se realiza con mayor intensidad
el efecto sobre la zona es isquemia, o sea se produce lo contrario, una
disminución de la circulación sanguínea, se pueden formar ronchas y finalmente
dilatación capilar pero en este caso su duración es más prolongada.
La utilidad
de los masajes cuando se realizan con mayor presión, por lo tanto se obtiene un
efecto mecánico, es la ayuda sobre la circulación, específicamente sobre los
efectos benéficos, del retorno venoso y linfático, evitando así las éstasis
vasculares. Al realizar mayor presión se facilita el vaciamiento hacia las
zonas naturales de eliminación, aumentando la velocidad de conducción y el
intercambio metabólico.
Los efectos
analgésicos que tiene el masaje, son muy importantes no tan sólo útiles para
las prácticas y lesiones deportivas, sino que también de utilidad para muchas
enfermedades, esta acción analgésica tiene sus fundamentos en los efectos que
tiene el masaje al actuar de forma inmediata sobre los conductores nerviosos de
dolor, así disminuye la conductibilidad tanto de las fibras sensitivas como
motoras.
Acompañado de
lo que se nombró anteriormente, sobre los efectos que la masoterapia genera
sobre la piel, como el aumento de la temperatura a consecuencia de un aumento
en el flujo sanguíneo por una vasodilatación. Se describen otros efectos
benéficos, relacionados más bien con temas estéticos.
Se ha visto
que el aumento del flujo sanguíneo, aumenta la capacidad vital de la piel y con
esto mejora la actividad enzimática y los proceso de regeneración, a su vez se
mejora las características mecánicas, haciéndola más lisa, elástica y suave.
En las
primeras etapas se produce suavización y adelgazamiento de la piel, pero esto
se modifica haciéndola más dura al tacto. Otra acción, es que el masaje produce
una limpieza de la piel, ya que hay mayor remoción de las células muertas que
se acumulan en la epidermis, eliminando así también los excesos de grasas y
detritus.
Además, los
masajes generan un aumento de la respiración celular y también, de la secreción
glandular, estos efectos tienen como consecuencia el aumento de la excreción de
desechos orgánicos, por ejemplo se ha visto un incremento en la eliminación de
neurotransmisores como acetilcolina y también de mediadores químicos como la
histamina, lo que favorece las condiciones para realizar una mejor contracción
muscular.
En relación
a la acción que tiene sobre las terminaciones y fibras nerviosas de piel, el
efecto anestésico es producto del aumento sobre el umbral doloroso, contrario
es lo que ocurre sobre las fibras motoras, ya que en éstas el efecto es de
excitación, y a la vez aumenta la velocidad de conducción.
Su utilidad
es sobre tejidos que presenten cicatrices ya que actúa generando una distensión
y reblandecimiento del tejido fibroso que forma la cicatriz, incluso llegando a
eliminar adherencias que se pueden formar entre la piel y el tejido subyacente.
Los masajes
son muy utilizados en las prácticas deportivas por los diversos efectos
benéficos que estos proporcionan, principalmente porque producto del aumento
del flujo sanguíneo ayudando con esto a recuperar los músculos de la fatiga,
mejora a su vez el proceso de reparación y con esto devolver la capacidad de
trabajo.
La acción
que tiene sobre estos tipos de tejidos va a depender de la intensidad con que
se realice. Si el masaje se realiza en forma suave, se generara la respuesta
refleja con dilatación de los capilares sanguíneos y relajación muscular, y
como consecuencia de esto se produce sedación, pero si el masaje se realiza de una forma más intensa, rápido y profundo, se
producirá la respuesta mecánica con estimulación, mejorando la excitabilidad
muscular y se produce deseo de actividad.
Como
consecuencia de la vasodilatación y el aumento de la circulación, hay una mejor
eliminación de desechos tóxicos y a su vez suministro de sangre fresca y
oxigenada, mejorando la nutrición muscular, flexibilidad y la vitalidad.
Otra
ventaja que aporta la masoterapia, es que no genera alteraciones en el
equilibrio ácido-base, impidiendo a su vez la acumulación de ácido láctico,
esto comprado con los efectos del ejercicio físico, claro que no tiene los
mismo efectos para aumentar la fuerza o la masa muscular, ni impide por si sólo
la atrofia muscular.
Es
importante considerar que la acumulación de ácido láctico que se produce
posterior a un ejercicio, produce una disminución en la elasticidad muscular y
como consecuencia de esto la posibilidad de generar lesiones.
Resultado
del aumento que se produce en el flujo sanguíneo, se produce una mejoría en la
nutrición de los nervios periféricos. Estos responderán frente a esto
dependiendo del tipo de nervios. Para el caso de los nervios sensitivos, el
efecto que genera el masaje es una disminución de la sensibilidad y por lo
tanto una disminución de la percepción dolorosa, por lo que su acción será
anestésica, contrario es lo que ocurre con los nervios motores, donde el efecto
es un aumento de la excitabilidad, contracción muscular y las ganas de
actividad, y finalmente sobre los nervios secretores la acción es un aumento de
la actividad secretora de las vísceras que son inervadas por ellos.
En relación
al aumento que produce sobre la fuerza muscular, se debe a la hipertrofia que
se produce en un tipo particular de miofibrillas, disminuyendo a su vez los
espacios sarcoplásmicos. Este aumento del tamaño celular no genera
necesariamente un aumento significativo del tamaño de los músculos, y un
adelgazamiento de la piel en la zona donde se realiza, por lo que es de
utilidad para personas de la tercera edad.
Los efectos
benéficos que tiene el masaje sobre estas estructuras están relacionadas con el
aumento de la elasticidad que este produce, por lo tanto estos tejidos al ser
más elásticos contribuyen a incrementar la movilidad de las articulaciones y
con esto reducen la posibilidad de lesiones y contracturas, ya que estas
generalmente se producen como consecuencia de la rigidez en algunas de las
articulaciones cercanas. Otro de los beneficios que podemos atribuirle a los
masajes, y que es de utilidad para los deportistas, es la disminución de edemas
articulares que pueden ser provocados, por ejemplo, por un aumento de la carga
mecánica sobre una articulación, lo que genera microlesiones, pellizcamiento de
bolsas sinoviales, modificación del contenido de líquido sinovial y por lo
tanto disminución de los rangos de movimiento.
Gracias a
que el masaje aumenta la elasticidad de los tejidos, el deportista puede
realizar movimientos que requiera una mayor amplitud, por lo tanto son de utilidad previo a la competencia sobre
todo cuando esta se realiza bajo condiciones extremas de temperatura, claro que
es necesario que el masajista tenga un caro conocimiento acerca de los rangos de
movimiento y de los ejes en que se realizan los movimientos para cada
articulación, siendo muy importante para los movimientos pasivos y
pasivo-activos que son usualmente utilizados en las sesiones de masajes.
Se ha
descrito que algunas técnicas de masajes pueden tener efecto sobre el sistema
endocrino, especialmente las vibraciones, donde se ha podido observar que
realizando esta maniobra en la zona abdominal por ejemplo favorece la
eliminación del jugo gástrico y sobre el hígado favorece la eliminación de
bilis. Al realizar vibraciones en la zona torácica, se obtiene también un
efecto benéfico, ya que disminuye y tranquiliza la actividad del corazón, esto
se produciría por la acción que tiene el masaje sobre las fibras del nervio
vago.
Son diversos
los órganos internos que son beneficiados gracias a las técnicas de masajes, ya
hacia fines del siglo pasado se vio que actuaba positivamente en el intercambio
gaseoso, también en el metabolismo mineral
y proteico y aumenta la secreción de sales minerales.
Producto
del aumento que genera el masaje en el organismo, se aceleran las reacciones
químicas y se favorecen todos los procesos metabólicos. A nivel del sistema
respiratorio el aumento de la temperatura trae como consecuencia una
disminución de la afinidad de la hemoglobina con el oxígeno por lo tanto
aumenta su disociación y con esto la disponibilidad de oxígeno en los tejidos y
su utilización. Incluso se describe que el aumento en 1° C la temperatura de
los tejidos aumenta en un 13% el metabolismo celular y la capacidad de difusión
del oxígeno aumenta en un 20%.
En relación
a cual es la técnica que mejor efectos produce, se vio que el amasamiento de
todo el cuerpo, aumenta en un 24,2% el volumen por minuto y en relación al
consumo de oxígeno se vio un aumento de un 33%, esto podría explicarse por una
acción del masaje a nivel de los centro respiratorios nerviosos, a través de el
efecto reflejo.
En el
corazón, y debido a la redistribución de sangre que se produce, decrece la
resistencia sanguínea por lo tanto facilita la actividad cardiaca.
A nivel
hormonal, se ha encontrado efectos antagónicos, ya que en aumenta el contenido
de algunas hormonas, pero también se ha visto que decrece las concentraciones
de otros. Cambiando la correlación entre algunas hormonas y mediadores
neurovegetativos, como catecolaminas, quininas,
corticoesteroides, serotoninas, etc. Y con esto cambia la actividad de
los complejos vegetativos y humorales, mejorando las funciones fisiológicas
para así normalizar la homeostasis.
Además, de
los esta amplia gama de efectos fisiológicos nombrados, no se pueden dejar de
lado los efectos sicológicos benéficos que los masajes también producen sobre
los pacientes, gracias a la atención personalizada y continua hacia ellos, y
efectos positivos sobre el sistema respiratorio, digestivo y otras funciones
vitales.
Gracias me ah sido de micha ayuda
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